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El 13 de septiembre de 1897, las Hermanas Capuchinas de la Madre del Divino Pastor inauguran un colegio en Bilbao, en la calle Correo, el primero fuera de Cataluña (a excepción de una fundación en Madrid que duró tan solo un par de años), pero el traslado a Las Arenas se realizó el 25 de junio de 1904. En la actualidad, las hermanas dirigen el único colegio religioso concertado que hay en la localidad; en él se educan los niños y jóvenes del entorno, contando con un número considerable de alumnado inmigrante, procedente de Filipinas, China y diversos países de Latinoamérica. Nuestro colegio se distingue por la buena acogida a los “diferentes” por país, raza o religión, tratando de integrarlos y vivir con ellos como hijos-hermanos de un mismo Padre, sin olvidar la necesaria inmersión cultural en el país de adopción. También se acogen niños con necesidades educativas especiales. La frase evangélica que tanto repetía el P. José Tous, nuestro Fundador, “dejad que los niños vengan a Mí y no se lo impidáis” (Mt. 19,14), se convierte en norma de convivencia y acogida en nuestro colegio. Es un colegio evangelizado y evangelizador, en el cual el desarrollo personal es seguido con respeto y en el que los miembros de la Comunidad Educativa tienen ocasión de conocer y amar a Jesucristo. Al mismo tiempo es respetuoso con otras opciones religiosas, valorando la dimensión trascendente de la persona. Se trabajan, también, además de los aspectos intelectuales y religiosos, los valores propios de nuestro Carácter Propio: la solidaridad, el respeto, el perdón, la paz, la acogida… y potenciamos el amor a María, Madre del Buen Pastor. |
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